Así entonces, el resultado de nuestros esfuerzos dependerá de :
- Demanda de armas de fuego. La misma estará determinada por la naturaleza y grado del conflicto o conflictos que se enfrentan. En toda sociedad existe –en mayor o menor medida- el sub mundo del crimen, con el indeseable desarrollo de un mercado ilegal de armas crónico. Muchas veces dicho mercado se ve incrementado como resultado de la existencia de otro tipo de conflictos (étnicos, religiosos, políticos, etc.), cuyo escalamiento determina una demanda adicional y variable de armas de fuego.
- Legislación adecuada. La existencia de normas legales que sancionen la tenencia y tráfico ilegal de armas y sienten las bases para su control, dotado de la flexibilidad necesaria para la oportuna regulación y limitación del flujo de armas. La ausencia de normas, su insuficiencia o ineficacia conspiran contra la obtención de resultados acordes con las exigencias de la seguridad común.
- Capacidad de respuesta. La presencia de instituciones policiales y de seguridad responsables de combatir el delito, con adecuado grado de preparación y equipamiento, constituye un factor determinante para la contención del tráfico ilegal de armas de fuego. La capacitación específica de las fuerzas del orden en la materia que nos ocupa resulta altamente deseable.
- Órgano de fiscalización. El cumplimiento de las obligaciones impuestas por la ley debe ser controlado por un organismo competente, debidamente dimensionado tanto en recursos humanos como materiales, técnicamente capacitado para el cumplimiento de su cometido y con un grado satisfactorio de autonomía operativa que le permita interactuar fluida y ágilmente con los organismos públicos y privados que coadyuvan a su cometido.
- Políticas de control de armas. Todo lo anterior deberá encuadrarse en políticas coherentes, basadas en datos de la realidad de cada día, que asignen contenido apropiado al mandato legal y hagan posible la indispensable coordinación de esfuerzos entre los principales responsables de la seguridad colectiva, esto es los organismos de fiscalización y control y las fuerzas policiales y de seguridad.Como derivación de lo que antecede puede afirmarse que el control de las armas de fuego reposa sobre dos presupuestos básicos, que son :
que deberá contemplar :
- la tenencia y portación sin autorización legal;
- la tenencia por un legítimo usuario de armas no registradas;
- la entrega de armas a quien no sea legítimo usuario o a menores;
- la fabricación y acopio de armas de fuego sin autorización legal;
- la omisión, supresión o adulteración del marcado;
- la asignación a dos o mas armas de idéntico marcado.
que deberá prever:
- las causales que justifican la tenencia de armas de fuego por parte de civiles, enunciando las distintas categorías de usuarios legítimos de las mismas (coleccionistas, cazadores, tiradores, etc.);
- una adecuada clasificación de las armas de fuego que podrán ser poseída por cada categoría de usuario admitida;
- el control de la inexistencia de circunstancias personales inhabilitantes para el otorgamiento de los permisos (antecedentes penales, policiales o de violencia familiar, ineptitud psicofísica, falta de idoneidad en el manejo de armas, etc.); y
- la variedad de procedimientos regulatorios de la totalidad de actos que comprendan armas de fuego, municiones y explosivos y su régimen de permisos.
- proyecte su fiscalización a todo el territorio del estado
- registre la mayor cantidad de armas existentes
- involucre todos los actos concernientes a armas de fuego
- realice el manejo centralizado de la información total
- recupere y proporcione la información con certeza y rápidamente
- obtenga la mejor calidad de los controles
- actúe como instrumento de una política de estado de control de armas